Este lunes 16.09.2013 falleció mi abuelo Alfredo, o mejor recordar que el 21.12.1914 nació quien fuera y muy probablemente sea el mayor Maestro que jamás tenga en esta vida.
Una
despedida de este estilo nunca es fácil (y aún más estando a tantos kilometros de distancia, ya que me encuentro en Polonia).
Enumerar
las cosas por la cuales lo admiré tanto sería interminable, simplemente
mencionar que fue la persona que me enseño de mejor manera Valores como bondad,
respeto, trabajo, humildad sin dejar de lado el amor propio, alegría, vitalidad,
integridad, amor a la familia...
Enumerar
las razones por las cuales lo quise tanto es más simple; él nos quiso a mis
hermanos y a mí como a nadie.
Se fue sin
sufrir, a sus 98 años de vida y repleto de vivencias en sus espaldas.
Ya lo lloré
mucho, pero seguir estando triste ahora sería un acto de egoísmo.
La
experiencia de vida en esta tierra es finita, y como tal un día termina, pero
que mejor que dejar estos suelos sabiendo que todas las personas con las cuales
compartiste tu tiempo, tus alegrías, van a recordarte con los mejores
recuerdos?
Creo que si
existe algo parecido al éxito en la vida, este no se encuentra en el dinero, en
la fama, ni en nada parecido; yo creo que se encuentra en cada uno de nosotros,
en lo que aprendimos, en lo que transmitimos, en lo que pudimos influir y en lo que vamos a dejar en los demás el día que no
estemos más físicamente.
Abue, los
valores y tu modelo de persona a seguir van a estar siempre presentes conmigo,
voy a hacer lo posible para poder
transmitir esto algún día a mis hijos, y así también de alguna forma, reencontrarte
en sus ojos y esencia.
Por todo
esto este es un momento para estar bien, para recordarte como te lo mereces
abue, con una sonrisa, como te voy a extrañar!
